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27 de octubre del 2022.

Cada elemento de la ofrenda tiene un significado desde las flores hasta las velas y la comida así celebran el día de muertos los mexicanos.

Al finalizar octubre es común ver que en los hogares mexicanos se encuentre montada una ofrenda para recordar a los seres queridos fallecidos.

La ofrenda que marca la celebración de Dia de Muertos es todo un ritual que va más allá de colocar velas flores, y comida en honor a quien retornaran de la vida eterna para convivir con los vivos. según el Instituto Nacional de los pueblos indígenas (INPI), la ofrenda es una mezcla cultural de los europeos y los indígenas y, aunque cada uno puede poner lo que guste, hay elementos imprescindibles. Por ejemplo, el agua, que representa la fuente de la vida y se ofrece a quienes llegan sedientos del camino que han recorrido desde el más allá a la vida terrenal.

Asimismo, un altar de Dia de Muertos debe tener sal para purificar el alma de los muertos y veladoras para indicarles su lugar en casa y el camino de retorno. Gracias a los indígenas se coloca un poco de para alejar a los malos espíritus y el hogar este “limpio” para recibir a los muertos.

En el pasado los creían que el cempasúchil era una planta curativa según el INPI ahora se utiliza solo para adornar y aromatizar las ofrendas. También hay quienes caminos de pétalos de la puerta    

Al altar para guiar a las almas visitantes.

El Dia de los Muertos es también una celebración para los mexicanos así que no puede faltar la comida en la ofrenda Debe tener un pan de muerto que en la religión católica representa el cuerpo de cristo, además de los platillos y las bebidas favoritas de los difuntos, incluyendo dulces y alcohol. El colorido es infaltable y por ello se adorna con papel picado que de alegría quienes llegaran la noche del 1 de noviembre y hasta las calaveras de chocolate o azúcar tienen un significado en la ofrenda de muertos son la representación pura de la muerte y están dedicadas a la santísima trinidad y el padre eterno.

Hay hogares que montan el altar de los muertos desde antes del 31 de octubre para recibir a los niños, con flores y velas blancas en honor a la pureza de su alma, sin faltar, dulces y pan en miniatura para consentirlos. Por supuesto la foto de cada ser querido es indispensable para recordar quien vendrá a casa.